Adios, pequeño Toyoto

Llevo desde ayer pensando como dar esta mala noticia y sinceramente no creo que vaya a encontrar las palabras adecuadas por mucho que le de vueltas, así que allá va...
Ayer por la mañana Toyoto falleció.
Nos deja desoladas, como cada vez que uno de nuestros animales rescatados se va.

A veces nos han preguntado cómo aguantamos este ritmo de pérdidas, y nos han dicho que estamos hechas de otra pasta o que no somos sensibles y muchas más barbaridades por el estilo.
Nosotras somos muy sensibles, hay que serlo para aguantar el tirón de más de 20 años rescatado animales en las peores condiciones que os podáis imaginar, desde que se empezaron a sacar de la perrera de Cantoblanco (que era un auténtico infierno y quienes nos conocéis de esa época sabéis de que hablo, desde animales muy enfermos conviviendo en jaulas animales muertos, hasta el maltrato psicológico que teníamos que aguantar por parte del personal del centro...) hasta hoy, donde la colaboración con el personal de la perrera ha mejorado mucho, pero nosotras seguimos haciéndonos cargo de los más enfermos, los que ya no tienen posibilidades allí al igual que los que rescatamos de la calle, heridos o sin posibilidades de seguir con vida.

A veces la gente confunde sensibilidad con fortaleza pero la vida nos ha demostrado que las personas más sensibles son las más fuertes, y las que pueden con todo, porque sabemos del sufrimiento que pasan los animales hasta llegar a nosotras, porque somos conscientes de que somos su última oportunidad muchas veces y porque sabemos que juntas podemos darles ese futuro que se merecen todos, o al menos luchar e intentarlo todo hasta el final.

Siempre os decimos que si ellos no se rinden, nosotras tampoco, pero el cuerpo de Toyoto ya no pudo más.

Ayer recibíamos la noticia mientras organizábamos adopciones y se nos caía el mundo a los pies.
Queremos agradecer a Rosa su disponibilidad (que le estaba esperando hace días en su casa), a Luma (por cuidarlo entre los ingresos), al @hospitalfelinomadrid por sus cuidados mientras estaba ingresado... a su Madrina Irene por ayudar a sufragar parte de los gastos veterinarios generados, así como a todas las personas que nos seguís, difundís y colaboráis económicamente con vuestros donativos siempre que podáis. Nos consta que no estamos solas y que cada triunfo o derrota es compartida.

Somos sensibles y cada animal que se nos va sin poder ayudarle nos disgusta y nos rompe el corazón.
Pero no podemos parar, porque hay que seguir trabajando por ellos. Porque hoy rescataremos a Miércoles de la perrera, gestionaremos las adopciones pendientes, actualizaremos la web y realizaremos publicaciones en redes sociales y tareas administrativas.
No podemos parar porque por cada gato que se va, vienen varios más, porque los abandonos siguen y nos necesitan todos los cachorros y heridos que no pueden vivir en la calle.
No podemos parar porque llega el verano, las adopciones se paralizarán y todo será más difícil.
Por eso no podemos parar, porque el mejor homenaje a Toyoto y su recuerdo, es seguir trabajando para salvar más vidas. Y por eso no podemos ni queremos parar. Porque nos necesitan.

Si te gusta nuestra labor, apóyala, te necesitamos para seguir salvando vidas.
Desde 1€ o 2€ al mes, si te ahces teaming, colaboras para que podamos continuar rescatando animales necesitados.

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